jueves, 31 de julio de 2008

Los importantes

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En Francia todos los escritores son importantes.
En Estados Unidos sólo los escritores exitosos son importantes.
En Inglaterra ningún escritor es importante.
En Australia tienes que explicar qué es un escritor.


El chiste fue contado por un agente editorial. Por desgracia, tomando en cuenta el 0.5 libro per capita que se lee en México, el chiste funciona si cambiamos la palabra "Australia" con el nombre de nuestro país.

La risa de Jego

Mi hijo Jego cuando tenía seis meses.

sábado, 26 de julio de 2008

La última cena (a la mexicana)

30 de Septiembre de 2004


Ayer noche fui a la cena de bienvenida que U. of East Anglia organiza para recibir a los nuevos alumnos mexicanos. La política de la universidad ha sido bastante exitosa atrayendo estudiantes de nuestro país, de manera que el rumbo de Norwich cuenta con cerca de unos 100 en total (no es pura generosidad: un estudiante no comunitario paga unas tres o cuatro veces más colegiatura que un británico). Anoche seríamos unos 30 y tantos (nuevo ingreso solamente). Nos invitaron a un restaurante de comida hindú. Como casi nadie conocía a nadie, empezamos a entablar contacto entre nosotros con las posibles cosas en común -la región mexicana de origen, la universidad, área de investigación, etc.-, pero los temas se agotaron pronto porque no parece buena idea hacer turismo retrospectivo desde lejitos y porque el campo de especialización profesional no suele ser un tema que dé para mucho como tópico cuando –aparte de los tres o cuatro chavos de marketing- todos estamos en distintas áreas de estudio. Así que a la media hora, los temas iniciales abrevaron en la preocupación más importante de un becario mexicano en la Gran Bretaña: el dinero. Especificando: el shock de la conversión cambiaria, el presenciar la reducción instantánea de nuestros potentes miles de pesos a unas cuantas libras esterlinas que no sirven casi para nada.

En algún momento de la noche, con el gusto de hablar en español y saber que íbamos a tener nuestra noche especial, era claro que no habría alguno que negara que uno de sus mayores motivos (sino el único, aparte de conocer a todos los otros de un jalon) era: comer gratis y bien. Por eso casi nadie ordeno más de una cerveza -la bebida no era gratis- y casi nadie dejó de decepcionarse de no haber pedido alguna mas -porque parejo nos pidieron 8 libras (unos 180 pesos) a cada uno por ese rubro. Al final de la cena incluso los platillos a medio terminar fueron reordenados para llevar -incluso algunas salsas sin ya nada de carne se metieron en trastes desechables, directos para la casa y el desayuno del otro día. Lo padre de la noche fue, en buena medida, que el humor mexicano suele ser como el de las películas de Medel y, ya saben que, andando en bola, todo mundo sabe reír y hacer chistes del hecho de estar jodido - lo que en nuestro caso significa que se puede uno reír de sí mismo.

Una pareja de cuates me dieron posada (todavía sigo en Sawston), porque para mi mala suerte perdí el camión. Estos amigos están en una situación aún más crítica que los demás, porque no cuentan prácticamente con ningún subsidio, pero están dispuestos a vender barata su miseria, incluso limpiando baños, con tal de sacar su grado (bien por ellos). Tuvimos tiempo de parlar y al final de la mesa de tragos (de agua de la llave (gratis, of course)) las historias que me contaron delinearon la idea de que los que estamos aquí formamos parte de un ghetto mexicano sin mucho contacto con otros círculos. Creo que no por una mera cerrazón mexicana a los otros o por rechazo de los ingleses; sino que me parece que los espacios de esparcimiento social que permiten el contacto con los británicos (estos de un talante reservado, en general), están mas allá de nuestras bolsas; de manera que mientras no nos saquemos la lotería para muchos la sociedad inglesa será de una fría e inalcanzable amabilidad. Comoquiera que sea esto no es bastante para que alguien se arrepienta de tener esta cara experiencia académica –ya sea por la calidad académica o por la solidaridad, la cercanía y la amabilidad inmediata de la banda mexica.

A manera de conclusión temprana, creo que el estereotipo del inglés que aplican los mexicanos que vienen al Reino Unido tiene que ver con diferencias adquisitivas y socioculturales. En términos generales los ingleses son reservados, hacen uso amable de los espacios públicos y se vuelven más calidos y abiertos en espacios cerrados de carácter social. Por ejemplo, la cultura de los pubs (los bares) es fantástica para formar ambientes de plática y cercanía alrededor de unas chelas. De mis apresuradas impresiones, me queda la idea de que los ingleses funcionan en equipos (cosa que no debe ser ajena al hecho de que la mayoría de los deportes modernos como el beis, el basquet, el fut americano y los precursores rugby, cricket y el fut sean producto de la cultura de raíces anglosajonas), son grupos de amigos que se divierten juntos, se buscan, se apapachan entre ellos, pero que con relativamente poca frecuencia salen solos o entran en otros equipos. Así que mientras no se tiene lana para entrar en los espacios de socialización es más difícil entrar en contacto con la gente de aquí, porque la universidad -aparte del desmadre (que hay y mucho)- es en teoría un espacio profesional y no uno para hacer cuates.

En fin que eso es lo que yo puedo decir un día antes de mi registro oficial a UEA y de saber mi programa de actividades propiamente, en el cual seguramente tendré chance de conocer a más gente que la mexicana. De manera que de nuevo debo confesar la provisionalidad de estas notas mal terminadas...

Reporteando para uds:
Marco

pd

Como quiera que sea y a pesar de que las estadísticas hablan de una alta fuga de cerebros, muchos sueñan con volver al terruño, quizás por el mero deseo de una vida menos jodida que esta -la acogedora idea de un lugar donde tus ingresos (del futuro) permitan olvidar el hacer cuentas y conversiones por cada panecillo que te echas a la panza. A pesar de todo esto, quizá algunos volverán con ínfulas altivas y el orgullo del mendigo (Nietzsche dixit); otros con el agradecimiento, el buen sabor de la experiencia y las ganas de aportar lo que se pueda al país (al menos eso dicen).

2ª pd
Los problemas de nuestro alojamiento no terminaran hasta el 12 de Octubre, según me acabo de enterar por un mensaje que recién me ha llegado y seguiré viviendo entre dos ciudades por un rato.

jueves, 24 de julio de 2008

Los primeros días de inmersión total

28 de Septiembre de 2004


Una vez leí una historia de ciencia ficción en la que un científico era contratado por una civilización extraterrestre, para ayudar a cuidar animales transportados en una de sus naves desde nuestro planeta hasta el suyo. Al regresar se encontraba conque se le había despedido de su trabajo por considerársele un posible traidor. En su exceso de tiempo libre escribió un libro para contar la experiencia de su viaje, hecho que le convertiría en el hazmerreír de la galaxia (por su primitiva y rudimentariamente hilarante interpretación de la tecnología alienígena) y en la mayor vergüenza publica de la Tierra en su -en ese momento- recién iniciada historia de relaciones interplanetarias.

La historia guarda una similitud con la relación de un área geográfica como la nuestra y uno de los países europeos como Inglaterra –supongo que la situación debe ser la misma con respecto a Francia y Alemania. Vistos desde la perspectiva de los prejuicios de gente que no viaja, como puede asegurarse de la mayoría de los mexicanos, los europeos son como alienígenas que seguramente se reirían no solo de la versión que tenemos de ellos, sino –sobre todo- de la que popularmente se tiene de nosotros mismos. Decir que los humanos son muy similares los unos a los otros en cualquier latitud o afirmar lo contrario no dejan de ser generalizaciones que, por supuesto, tienen elementos de verdad, pero que hilando fino son siempre inexactas. Lo cierto es que la mayoría de nosotros somos como el científico del cuento: en cuanto que nuestra curiosidad nos aventura a interpretar, caemos en deformaciones de perspectiva; por otro lado, en cuanto, que no nos interesa saber de los otros, nos convertimos en autistas.

En algún otro sentido, lo que nos convierte en alienígenas a los unos para los otros es obviamente el desconocimiento y la mala información. Elementos que, propiamente, constituyen la medula de los estereotipos y los prejuicios con que solemos pensar a los demás evitándonos la fatiga de conocerlos y negándonos la ventaja de reflejar nuestra complejidad. Ciertamente los viajes ilustran, pero si no hay dinero para viajar, se vuelven inalcanzables; y si lo hay en demasiada, con suma frecuencia suelen degenerar en turismo de restaurante y foto junto a templos y catedrales. Lo medular de la cultura ajena no se abre paseando entre sus monumentos arquitectónicos: si la gente que los ha levantado esta ahí y se vuelve accesible, se nos permite una posibilidad más, pero no por eso se tiene una perspectiva completa del asunto, por fortuna. Obviamente están los libros, la música, la comida, etc., pero todo eso de cualquier manera nunca será definitivo, aunque se pueda decir que se aleja de la parcialidad y el reduccionismo; sin embargo, es una manera de completar el espejo con el que podemos contemplarnos a nosotros mismos como seres humanos. Quizás estoy siendo demasiado ingenuo, pero creo que –sin afirmar que es estrictamente indispensable moverse físicamente más allá de nuestras fronteras- quien sólo quiere conocer bien su cultura, no conoce ninguna (nada) en realidad.
No quiero ir muy lejos con mis tres días de inmersión total, así que debo decir que todo esto es refutable o corregible, pero las impresiones deben decirse como vienen para no dejar de ser lo que son.

Les beso a todos.

sábado, 19 de julio de 2008

En retrospectiva

En retrospectiva, el pasado siempre puede contemplarse a otra luz que a la de la verdad. Deformar la miscelanea variedad de nuestra vida, con la nostalgia o el menosprecio, es una actividad demasiado común de la memoria. El pasado es un tiempo que sí puede conjugarse, el más maleable, el más cambiable.

viernes, 18 de julio de 2008

Esta es la selección y traducción completa de aforismos ingleses que me publicaron este mes.
Pueden ver la nota completa en la revista Casa del Tiempo, siguiendo este link:

http://www.uam.mx/difusion/casadeltiempo/09_iv_jul_2008/casa_del_tiempo_eIV_num09_48_58.pdf



Perlas del Ingenio inglés

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El hombre –animal de creencias- nunca es tan veraz como cuando actúa un papel.
Hazlitt

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Tratad bien a los hombres y a las mujeres; tratadlos como si fueran reales. Quizás lo sean.
Emerson

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- Me pregunto qué placer obtendrán esos hombres que hacen de sí mismos unas bestias.
- Me pregunto, Señora mía, si podrá entender los incentivos de ese exceso: quien hace de sí mismo una bestia se libera del dolor de ser un hombre.
Dr. Johnson.

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Se requiere mucha altura de pensamiento para elevar la vida aunque sea un poco.
Emerson

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Nada nos parece más atroz que la razón, cuando no está de nuestro lado.
Halifax

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Pensamos tal como pensamos más que nada porque otros piensan así.
Samuel Butler

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Cuando la especulación llegue a su peor nivel, dos y dos seguirán siendo cuatro.
Dr. Johnson

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Por lo general, la esperanza es mala guía en el camino, pero es una estupenda compañera de viaje.
Halifax

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Esperanzas: los únicos lazos que evitan que el corazón se caiga a pedazos.
Thomas Fuller

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La parte más útil de la sabiduría es suponer con benevolencia lo que otros piensan de uno. Es algo peligroso hacerlo a medias y cosa muy triste hacerlo a cabalidad.
Halifax

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Para la mayoría, la conciencia es anticipar la opinión de los otros.
Sir Henry Taylor

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Ante la presencia de un alma cuyos actos son encantadores, graciosos, y placenteros como rosas, debemos agradecer a dios que tal ser pueda existir y que, de hecho, exista; no tornar avinagradamente contra él pensando: “Demonios, ofrece una resistencia encarnizada contra su maldad innata, sólo por eso es que es un hombre mejor.”
Emerson

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Nada es más desagradable que una persona virtuosa con alma cruel.
Bagehot

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Nadie practica tan bien como escribe. En mi larga vida, yo siempre he reposado en la cama hasta el mediodía; sin embargo, a todos los jóvenes les digo –y lo hago con sinceridad- que quien no se levante temprano nunca hará nada bueno.
Dr. Johnson

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Muchos irían al cielo con la mitad del trabajo con que consiguen ir al infierno.
Ben Jonson

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El autosacrificio personal permite sacrificar a otros sin sonrojarse.
Halifax

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La vida progresa de un “quiero” a otro “quiero,” no de un placer a otro.
Dr. Johnson

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El esparcimiento es la felicidad de los que no piensan.
Pope

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La vida más feliz es aquella que nos ofrece más oportunidades de ganar nuestra propia estima.
Dr. Johnson

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La felicidad es la única sanción válida de toda existencia. Cuando falta, la vida se torna un mero experimento lamentable y absurdo.
Santayana

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La mala fortuna nunca abatió a quien la buena fortuna no logró engañar.
Ben Jonson
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No hay un deber más menospreciado que el deber de ser feliz.
R. L. Stevenson

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Lamentarse es mera autocomplacencia, signo de un corazón y cabeza enfermizos. Los hombres suelen dejarse caer mientras se lamentan y, mientras lo hacen, nadie se preocupa de levantarlos.
Dr. Johnson

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Las miserias de la existencia se incrementarían más allá del poder para resistirlas, si llegáramos al mundo con las ideas con que lo abandonamos.
Dr. Johnson

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Ninguna sabiduría hay en la desesperanza y en la tristeza; pero tienen algo similar a la virtud: quien carece absolutamente de ellas no puede ser amado.
Dr. Johnson

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Conocer exactamente la causa de nuestra pena es un consuelo en sí, pues es un cambio desde la emoción al entendimiento.
Santayana

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Entenderse a uno mismo es la forma clásica de consuelo; pero escaparse es lo romántico.
Santayana

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Las universidades son una especie de asilos lunáticos para preservar a los jóvenes de meterse en problemas.
Bishop Creighton

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Estar interesado en el cambio de las estaciones es, a la mitad del camino, un estado de la mente más dichoso que estar enamorado sin esperanza de la primavera.
Santayana

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El poder complace al violento y al orgulloso; la abundancia deleita al plácido y al timorato. De aquí que la juventud corra hacia el poder y la vejez renquee tras las riquezas.
Dr. Johnson

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El precio que tenemos que pagar por el dinero lo pagamos con nuestra libertad.
R. L. Stevenson

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Con toda probabilidad, aquellos que sostienen que el dinero puede hacer cualquier cosa, pueden hacer cualquier cosa por dinero.
Halifax

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El tiempo, con toda su celeridad, pasa lentamente para aquel cuya única ocupación es verle volar.
Dr. Johnson

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Considero a la indolencia como una suerte de suicidio, en la cual el hombre es cabalmente destruido, mientras los apetitos del bruto sobreviven.
Chesterfield

La mayoría de la gente se complace con la inferioridad de sus mejores amigos.
Chesterfield

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La vanidad de ser alguien a quien se pueden confiar secretos es generalmente uno de los mayores motivos que nos impulsan a confesarlos.
Dr. Johnson

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Hablar sobre el carácter y las debilidades de los amigos comunes es un gran cimentador de amistades.
Hazlitt

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Aprovechar los buenos consejos requiere más sabiduría que darlos.
Churton Collins

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Pocos, especialmente si son jóvenes, saben cómo amar o cómo odiar. Su amor suele ser una debilidad ilimitada, peligrosa para quienes aman; su odio, una virulencia desagradable y violenta, peligrosa para ellos mismos.
Chesterfield
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El amor es uniforme, pero el cortejo es una variación perpetua: las diferentes artes que la galantería ha inspirado serían suficientes para llenar volúmenes.
Dr. Johnson

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Hay pocas cosas más difíciles de aceptar -incluso en las edades más avanzadas- que la creencia de que todavía tenemos cualidades para agradar al sexo bello.
Dr. Johnson

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El deseo del hombre es por una mujer; raramente el deseo de una mujer es por otra cosa que por el deseo del hombre.
Coleridge

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En las mujeres: piedad engendra amor. En los hombres: amor engendra piedad.
Churton Collins

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Toma mucha paciencia apreciar la felicidad doméstica, los espíritus inconstantes prefieren la desdicha.
Santayana

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El paraíso de los tontos es un infierno para el sabio.
Thomas Fuller

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Buscar reírse de los tontos, es el camino para llegar a ser uno de ellos.
Thomas Fuller

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En este mundo, un hombre frecuentemente será reputado de ser sensato, por la mera razón de no ser hombre de talento.
Sir Henry Taylor

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El sabio, como la luna, muestra al mundo sólo su lado brillante.
Churton Collins

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Un tonto fracasa frecuentemente porque considera fácil lo que es difícil; el sabio porque cree difícil lo que es fácil.
Churton Collins

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Se puede hacer muy poco sólo con fe, mas no puede hacerse nada sin ella.
Emerson

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Nuestro deber en el mundo no es tener éxito, sino continuar fracasando con el espíritu en alto.
R. L. Stevenson

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Las antipatías virulentas siempre son sospechosas: delatan afinidades secretas.
Hazlitt

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Enojarse es vengar las faltas de otros en nosotros mismos.
Pope

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Observad a un hombre arrebatado por la pasión: ved sus ojos en llamas, su rostro enardecido, sus miembros agitados, su lengua tartamudeante y enajenada. Entonces, con calma, pregúntate a ti mismo si bajo alguna circunstancia te convertirías en esa bestia salvaje.
Chesterfield

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No hay mejor prueba de carácter que conducirse apropiadamente en una disputa que no se puede evitar.
Sir Henry Taylor

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Esos que están en guerra con los demás, no están en paz con ellos mismos. Es el desasosiego, la turbulencia, la acrimonia interiores lo que recula contra el mundo exterior.
Hazlitt

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La envidia, entre otros ingredientes, tiene una mezcla de amor y de justicia. Estamos enfadados ante el poco mérito de los afortunados.
Hazlitt

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La envidia es la forma más sincera del elogio.
Churton Collins

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La envidia y el miedo son las únicas pasiones a las cuales no está ligado algún placer.
Churton Collins

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La verdad es hermosa, sin duda alguna. Asimismo, las mentiras.
Emerson

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Nunca hables en tu mejor nivel ante los tontos.
Chesterfield

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La literatura, en muchas de sus ramas, no es otra cosa que la sombra de la buena plática.
R. L. Stevenson

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Si dios te ha dado ingenio… pórtalo como una espada en su vaina, no lo blandas aterrorizando a los que te rodean.
Chesterfield.

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Una vida buena es el mejor argumento.
Ben Jonson

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La gente odia a aquellos que hacen les hacen sentir su propia inferioridad.
Chesterfield

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Existe el peligro de ser persuadido antes de entender.
Bishop Wilson

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Una diferencia de opinión -así sea sobre cosas sin importancia- separa a las mentes pequeñas, especialmente en los cargos más altos.
Chesterfield

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Nadie simpatiza con las desdichas de la vanidad.
Dr. Johnson

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Quien piensa que su posición no lo merece, infaliblemente desmerecerá su posición.
Halifax

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Aunque el orgullo no es una virtud, ciertamente es el padre de muchas de ellas.
Churton Collins.

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La gentileza es una benevolencia ficticia.
Dr. Johnson

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Las mujeres que son indisputablemente bellas o indisputablemente feas, suelen ser fácilmente halagadas sobre el poder de su entendimiento.
Chesterfield

*
Ninguna sirena encanta tanto al oído como la atención del oído encanta al alma de una sirena.
Sir Henry Taylor

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Una época ignorante es una época de ceremonias.
Dr. Johnson

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Cuando la multitud se inclina por el derecho, es siempre por razones torcidas.Chesterfield

[1] En la producción editorial de habla inglesa, el porcentaje que corresponde a las traducciones no rebasa el 3% en Gran Bretaña y el 2.5% en Estados Unidos. Véase: http://www.atypon-link.com/ [página revisada el 1º de abril de 2008.]
[2] Fadiman, Clifton (1962). “Introduction” to Lec, S. Jerzy. Unkempt Thoughts. New York: St. Martin's Press, p. 17.

miércoles, 16 de julio de 2008

Notas de Inglaterra. 27 Sep. 04

Incorporo en este blog las notas de las primeras semanas de mi llegada a este País.

Notas de Inglaterra.


27 Sep. 04

Mis primeros días en Inglaterra han sido una fría delicia. Después de un atorón de trafico de varias horas en la carretera México-Puebla, la perdida del vuelo por unos cuantos minutos, el extravío de nuestros pasaportes, un segundo vuelo un tanto retrasado varios días -y miles de pesos- después y, finalmente, un autobús que se descompuso delante de un incendio antes de llevarnos muy retrasados a Cambridge, he pasado dos días de descanso y recuperación del jet lag que han servido para lidiar con el descontrol del pequeño Dante - que no ha dejado de ser gitano desde hace un mes, el pobre.

Ayer fuimos (Juliet, Dante y la familia de mi cuñada) al lugar donde Virginia Woolf, Wittgenstein, Ted Hughes, Keynes, Russell y no recuerdo quién más solían ir a tomarse sus chelas. Pasear sobre el verde pasto ingles parece parte del guión de una película que me toca presenciar en tres dimensiones (no sE si serA un efecto de esas cervezas que emborracharon también a los susodichos). Ciertamente el cielo es un tanto gris, pero no deja de tener su encanto. El clima, por otro lado, anuncia un otoño maravilloso, espero que sea un augurio de mi vida.

Por otra parte, afortunadamente he traído algunos libros, pero por ahora parece que esta no es la mejor atmosfera para empezar a trabajar en mis cosas: mucha gente amable -deliciosamente amable- ha estado alrededor de nosotros, y por esa gracia no he tenido tiempo de empezar los días con ese ritmo de lenta apuración que el trabajo intelectual requiere. Realmente el único verdadero problema (si es que existe alguno) es que aun no nos han dado nuestra casa en Norwich; y como van las cosas parece que estará lista hasta el 7 de octubre o algo así. Sin embargo, parece que estando tan cerca de esta ciudad universitaria de Cambridge no faltaran lugares para trabajar. Me muero de ganas por conocer las bibliotecas, pero no sé exactamente cómo encontrarlas, de manera que haré contacto primero con el hermano de un amigo para conseguir buenos consejos, empezar a formar mis rutinas y para no empezar a sentir el estrés de estar tan relajado en un ambiente tipo vacacional.

Ahora recuerdo Huajuapan y no tengo en la claridad de la memoria más que los buenos momentos, pero sin llegar a constituir con ellos el ingenuo ideal de un paraíso terrenal. Me alienta la posibilidad de poder recuperar eso algún día, pero a la vez quisiera no perder nunca esto que pinta será maravilloso: el periodo inglés de mi vida se me antoja a corta distancia una promesa magnífica, bastara que deje pasar unos días para empezar a saber cuanto es verdadero. Ya les estaré contando.


Un abrazo

viernes, 11 de julio de 2008

Sobre batallas y vacíos: Arturo Pérez-Reverte.

Sobre batallas y vacíos: Arturo Pérez-Reverte.

publicado en letralia
http://www.letralia.com/191/articulo05.htm

La pluma de Reverte ha dado a la literatura escrita en castellano muchas de sus páginas más entretenidas. Aunque en la narrativa de este autor, en general la acción es motor y guía fundamental; en contraste, cuando se paladea El pintor de batallas (Alfaguara, Madrid, 2006) el gusto meditativo es esencial. A lo largo de esta novela se encuentran esparcidas reflexiones diversas sobre la nada y el ser, el amor y la soledad y, claro, la pintura y el arte, que le otorgan un carácter menos ligero que a otros textos del mismo escritor.
Debe decirse que, desde el punto de vista narrativo, presentar en el flujo de la trama una serie de momentos filosóficos implica una empresa con muchas complicaciones técnicas que necesita mucha pericia o mucha osadía (o ambas) para llevarse a cabo. En este sentido, la mano experta de Reverte se esfuerza constantemente en construir la tensión que sirva de sostén a los momentos más profundos e intimistas de la obra. Como sea, la anécdota inicial no es, francamente, muy llamativa: un famoso fotógrafo de guerra retirado, Andrés Faulques, compra una torre abandonada para pintar un mural en su interior. El tema de su pintura es algo que Faulques considera esencial en el flujo de la vida: las guerras de la humanidad como alegoría de una misma batalla continua, inacabable. A esto se agrega un lugar común existencialista: el artista no aspira a nada con su obra, sólo aislarse para realizar su trabajo sin interrupciones y al final dejarlo para la ruina o el olvido. Sin embargo, la aparición de un desconocido complicará estos deseos.
Un joven de acento extranjero, Ivo Markovic, contacta y vence las reticencias del pintor de batallas haciéndose reconocer de una manera peculiar: es un ex–soldado croata, quien alcanzó fama como un rostro de la guerra debido a una fotografía de Faulques. Podría pensarse que los caminos de ambos hombres se cruzaron de manera fugaz e involuntaria, que Faulques de manera profesional –es decir, impersonal- hizo una toma de Markovic y que esta circunstancia no constituye un punto de apoyo suficiente para establecer una relación; sin embargo, El pintor de batallas intenta mostrar que la vida no es tan sencilla como la forma en que solemos pensarla.
A lo largo de la novela, los dos hombres traban una relación conversacional basada en perspectivas distintas con un punto de coincidencia. Ambos son testigos personales de la guerra y ambos han meditado mucho sobre su horror o debido a éste. Faulques ha devenido una especie de creyente de la tesis cosmológica heraclítea de la lucha de contrarios como principio universal de todas las cosas. En una escala humana, su experiencia de reportero parece confirmar que la cosmología determina la sociología; de hecho, en ese sentido, se pueden perseguir cadenas de causas y consecuencias en todos los recovecos de nuestro modo de vida, verbigracia: a la base del precio del gas que calienta nuestras estufas o de la gasolina de nuestro transporte están las guerras contemporáneas por el petróleo; nuestra buena conciencia de consumidores de energía es un disfraz de nuestra ignorancia: la comodidad moral se compra en algunas sociedades al precio del olvido de la guerra que hacen contra las sociedades que las subsidian. La consistencia con esta manera de ver el mundo establece, para Faulques, la aceptación de una consecuencia lógica: la perpetración inacabable del mismo horror; por eso escribe Reverte, “Sólo los niños muertos no eran verdugos del mañana”(270). En contraparte, pero poniéndolo en términos en algo similares, aunque Ivo Markovic ha sido víctima de los designios de este determinismo cosmológico, su perspectiva es otra: él cree en la responsabilidad de los ejecutores y los provocadores individuales del destino –o dicho de otra manera, cree que la libertad y en la culpa y esto activará el conflicto principal de la trama.
La creencia de Ivo Markovic lo vincula al pintor de batallas de una manera imprevisible, pero insospechadamente íntima: cuando el genocidio contra las minorías étnicas era ‘prerrogativa’ serbia, por causa de la fotografía de Faulques, Markovic fue identificado y sometido a torturas más atroces que las habituales, y su mujer –de ascendencia serbia- y su pequeño hijo, fueron violados, torturados y asesinados como parte del programa de pureza de sangre y limpieza étnica serbias. Sin aquella foto de Faulques en el eslabón de causas y responsabilidades -especulará Markovic-, las consequencias hubieran podido ser otras. Sin reconocer culpas concretas, Faulques hará una concesión:

Que fotografiar a personas también es violarlas. Golpearlas. Se las arranca de su normalidad, o tal vez se las devuelve a ella, de eso no estoy muy seguro... También se las obliga a afrontar cosas que no entraban en sus planes. A verse a sí mismas, a que se conozcan como nunca se habrían conocido de otro modo. Y a veces se las puede obligar a morir. (269)

A lo largo de la novela ambas perspectivas se enfrentan en una dialéctica que no es de consecuencias meramente teóricas: para Markovic, Andrés Faulques es culpable y es por eso que lo ha buscado para matarlo.
En algún lugar de la novela, las discusiones de los dos hombres darán paso a otro sub-texto: Faulques recordará a su mujer, Olvido Ferrara, muerta fotografiando esa misma guerra. Esta otra historia no será en El pintor de batallas, como es lo convencional, vislumbre de una esperanza de redención romántica: las nostalgias de Faulques harán repaso de una relación amorosa que confirma, en una escala íntima y terrible, sus propias tesis y (en un bucle inesperado) las de Markovic: Faulques no está libre de culpa.
Cabe añadir que la relación de Faulques y su amada también está cargada con una profundidad intelectual en la que se espejea la discusión de Faulques y Markovic. En este sentido, aunque la relación amorosa de Andrés Faulques y Ferrara podría agregar una dimensión de intensidad afectiva a la novela, desafortunadamente la necesidad de crear otro personaje demasiado intelectual lastra la emotividad. Olvido Ferrara es una joven ex-top model cuya sutileza intelectual supera la de un Profesor de Oxford, i. e. un personaje creado sin mucha preocupación por estándares de verosimilitud realista. Pero este no es el hecho que complica la empatía con el personaje, sino que en la narración (siempre desde el punto de vista de Faulques), Olvido Ferrara se nos presenta vacía y su nada interior -en sentido existencialista-, siendo un enigma, difícilmente ofrece un espejo para reflejar la humanidad del lector. De manera que es difícil identificarse con ella: demasiado intelectual, demasiado lúcida, demasiado dark, con poca carga emotiva, cerca del cinismo, inaferrable y –predictiblemente- demasiado bella, demasiado sexy. En contraste, aunque el personaje de Ivo Markovic nos requiere aceptar una complejidad intelectual poco consistente con su pobre bagaje educativo, su historia avanza sobre una tensión emocional sostenible. En cambio, la historia de la relación de Faulques y su amada requiere de cierto voyeurismo y de cierto interés incondicional por la reflexión desencantada sobre este mundo de guerras y vacíos. Interés que, seguramente, los seguidores Pérez-Reverte no dudaremos en otorgarle.

martes, 8 de julio de 2008

En vísperas del Viva Voce

A casi 4 años de mi llegada a Inglaterra paladeo la víspera de mi examen doctoral. Antes de venir, platicaba con Juliet sobre los miedos e inseguridades premonitorias que me provocaba la perspectiva de hacer en otra lengua un doctorado de estudios de literatura. Había una posibilidad que me atemorizaba: devenir una especie de idiota lingüístico (en una facultad dedicada al estudio y al cultivo del lenguaje literario).
Recuerdo que volverme un disléxico funcional fue un problema horrible en más de un sentido. No sólo porque la autoestima personal (y profesional dado el caso de mi perfil humanístico) se apoya en las relaciones que se establece con los otros a través del la lengua, también por el hecho más humano de las dificultades para hacer contacto con los otros -cuando la soltura en el lenguaje no forma parte de la ecuación, las relaciones sociales se constituyen en una carencia emotiva y cognitiva constante.
Al principio, mi competencia lingüística era una especie de juego intelectual en el que una fórmula lingüística en castellano tenía que trasladarse a coordenadas semejantes -o al menos aproximadas- del inglés. La operación no era siempre posible y hablaba yo a medias, vivía yo a medias, existía yo a medias. Debe decirse que la práctica aumenta las proporciones del ser y del vivir en otra lengua, pero son aproximaciones, traducciones de un otro lejano que nos habla con otros tonos y otros sabores.
No sé si todo eso describe mi experiencia de manera fiel, pero quisiera cerrar con una nota auto-gratificante: aunque mi formación en inglés ha sido mayoritariamente autodidacta (por lo cual me fue negada la beca de manutención Conacyt con el argumento burocrático inapelable de que carezco de un certificado oficial de inglés) estoy a punto de defender un examen doctoral. Y aquí viene la cereza del pastel: dos poetas británicos laureados (tres premios T. S. Eliot entre ambos) formarán parte del equipo de examinadores ante el que defenderé mi tesis este septiembre 2008. Deséenme suerte.

jueves, 3 de julio de 2008

Fútbol y brujería: el aprendiz y el Master

En el año 2007, compitiendo en un grupo de calificación relativamente fácil, Inglaterra se quedó fuera de la Eurocopa de futbol. La nación que ostenta el prestigio de haber inventado este deporte dejó su lugar a Rusia -que, a juicio de no pocos expertos, tenía una escuadra en la que difícilmente alguno de sus jugadores sería titular en caso de jugar para la selección inglesa. El director técnico inglés, Steve Maclaren fue despedido (con toda justicia) cargando en su haber un fracaso mayúsculo y vergonzosas derrotas contra Croacia, una de ellas en el recién reestrenado estadio de Wenbley.
Desde el principio de su gestión, sólo la decencia profesional de los medios ingleses impidió airear lo que la mayoría de los aficionados habían visto como la crónica de un fracaso anunciado: los hinchas ingleses temieron por su clasificación desde que un hombre gris, de sonrisa de administrador contable y labia de agente de ventas se encontró con la suerte de tener los destinos del equipo de la rosa en sus manos. A toro pasado, las causas a las que se atribuyó el fracaso fueron diversas: la falta de carisma y liderazgo de Maclaren, su falta de experiencia, su carácter timorato y complaciente y, por supuesto, su evidenciada carencia de inteligencia estratégica. La mayoría de tales causas participaba en la explicación.
Sin embargo, la contratación de Maclaren había sido hecha de acuerdo con una estrategia general planeada con antelación por la F. A. (el organismo rector de este deporte en Inglaterra). Casi diez años atrás la F. A. había contratado al sueco Sven Goran Erikcson para dirigir al equipo de la rubia Albión. Erickson era un manager con reputación internacional, elegido para cubrir la falta de experticia que aquejaba a los técnicos nativos. La segunda parte del plan era poner a un asistente con deseos de aprender, quien con el tiempo podría llegar a ocupar la posición de su mentor. Ese asistente fue Maclaren. La selección inglesa bajo el mando de Sven Goran hizo un papel decoroso en todas la competencias importantes, se esperaba que un observador cercano del proceso llegaría a dominar los mecanismos del proceso y, quizás, a ascenderlo a otro nivel. Pero a su turno, Maclaren se encargó de repetir sin mucho juicio las medidas que en circunstancias diferentes habían sido exitosas.
Aunque el fracaso de Maclaren demostró con creces la falla del experimento, la premisa no era del todo equivocada. La F. A. creyó que la conjunción de un maestro y de un aprendiz produce la transmisión del conocimiento. Esto es, ciertamente, plausible; por desgracia lo cierto es que no siempre ocurre así. Es lógico creer que los poseedores del conocimiento especializado tienen mucho qué enseñar; lo cierto es que no siempre saben cómo hacerlo –también parece razonable creer que hay cosas que se pueden aprender pero que difícilmente se pueden enseñar. Por otro lado, los que no saben tienen mucho qué aprender, pero su aprendizaje no siempre depende de su propia voluntad; a veces simplemente por falta de capacidad para aprender. En el mejor de los casos puede decirse que a la F. A. le falló una variable: consiguió al maestro, pero el aprendiz no era el adecuado.
La F. A. sabe que el fracaso de esa ocasión no deshecha la validez de la premisa. Un hombre con todavía mayor prestigio que Sven Erickson ha sido contratado para dirigir al equipo de la rosa: el italiano Fabio Capello. Capello ha hecho la magia de ganar nueve títulos en ligas europeas, es conocido por su carácter, su inteligencia estratégica, su falta de condescendencia con las opiniones de los poderosos pero poco informados medios de comunicación, su experiencia y, sobre todo, por su efectividad con los resultados –características tan echadas en falta en la gestión previa. El maestro ha llegado, la F. A. busca ahora a su aprendiz de brujo.

Dante y las gaviotas del otonho

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